“El dolor más grave de los labradores de este partido es el que continuamente
están sobre la tierra (pues así lo exige también su fertilidad) y todo su sudor lo
arranca y absorbe el monopolista, que es el amo de las fincas, sin que al fin y
postre se le perciba ni resulte utilidad que sea bastante a subsanar su fatigable
tarea. Es mucha gloria ver pedazos de montes los más áridos e incultos, lagunas,
etc., llegar a una perfecta labrantía, con edificación de algunas habitaciones, todo
a fuerza de muchos miles de carros de ocla (oncla) y arena de mar, que poseen en
los días y noches de invierno con mucho peligro de la vida, pues se arrojan por
unas peñas y desfiladeros que se dificulta los transiten las cabras”
Del informe enviado en 1799 por el administrador de la aduana de Ribadeo al Administrador General de Rentas de Galicia
Fuente:
“Actividades agromarítimas en el noroeste peninsular. El aprovechamiento agrícola del “estiércol marino” en la Galicia de los siglos XVI-XIX”
Hortensio Sobrado Correa Universidad de Santiago de Compostela